Mi nombre es Romina Gil
Supe que la fotografía y yo íbamos a tener un romance de por vida cuando a los 13 años encontré la cámara que había sido de mi papá y comencé a dar mis primeros pasos en este camino. Desde entonces me dediqué a retratar y documentar la historia de mi familia en vacaciones, cumpleaños, nacimientos y cualquier ocasión que lo ameritara.
En el 2013 me compré mi primera cámara reflex y a partir de ahí la historia cambió. Mi evolución no fue lineal: hay capacitación académica y tengo mucho de autodidacta. Hasta el día de hoy sigo estudiando, investigando y practicando. He pasado por varias etapas: eventos, retratos, books, productos y sigo buscando mi camino, mi estilo.
Me inspira lo cotidiano, esos pequeños detalles que hacen que la vida merezca ser vivida y disfrutada.
Me gusta decir que mi superpoder es detener el tiempo para atesorar esos momentos, únicos e irrepetibles, en los que fuimos felices.
Trabajemos juntos
Estoy disponible para trabajos independientes, colaboraciones y proyectos creativos.
Si te interesa trabajar conmigo, me encantaría saber de vos.